A través de un «Rescriptum» de la normativa laboral vaticana, el pontífice dispuso que «el empleado tiene derecho a tres días de permiso retribuido en ocasión del nacimiento de un hijo«.
En el caso de las madres, la licencia paga es de seis meses con un formato de dos meses antes del nacimiento y cuatro después, pero que puede variar si un tribunal médico autoriza a la mujer a trabajar hasta el octavo mes de embarazo.
Respecto de los padres, en la nueva normativa, difundida por la oficina de prensa del Vaticano, se establece que «los tres días de permiso, a entenderse sobre días laborales«, será computados con un «tratamiento económico del 100% de la retribución« recibida, convirtiéndolos en remunerados.
Además, la nueva norma prevé que la licencia paga «se aplica también al padre adoptivo o en custodia«.
———————–Fernanda Andrea Sanchez
Coordinación general y periodística
Martín Zevi
Coordinación del Dpto. Audiovisual